VISAJE CIUDADANO
La ciega
…Una sociedad!
Ahora que México se encuentra en un contexto que nadie pensó que llegaría, donde hemos sido arrastrados por los problemas, económicos, políticos y socioculturales, donde pareciera que el gobierno federal encabezado por el presidente de la República ha perdido el juicio y cada vez se torna más difícil salir el hoyo en el que se ha ido hundiendo poco a poco. Con los desacertados cambios en el gabinete que todos juraríamos están probando a ver quién puede encabezar el rumbo del país. Una sociedad cansada, harta, apática e indiferente a los problemas sociales. Solo como espectadores y críticos cada uno desde sus trincheras. Compartiendo en redes sociales los problemas y posibles soluciones, pero sin acciones. Una sociedad a la que le gusta que todo le den, la que espera que un miembro de la familia trabaje en algún nivel de gobierno para hacerse rico y no para servir a nuestro país. Una sociedad individualista que, si no lleva beneficio personal, no participa. Es eso México, un país donde existen las protestas por los capos, los artistas, las comunidades gays y todo lo que se les antoja, y no de participación, propuestas y acciones para que los funcionarios hagan mejor su trabajo. Donde las elecciones se ganan con un 30% del 50% que vota, porque el otro 50% no participa. Una sociedad que se afecta así misma creyendo que con su actuar afecta al gobierno. Donde existen los votos antisistema, donde existen más de diez partidos políticos y millones de asociaciones civiles desviadas como capital político, para los procesos electorales. Un país donde no se organizan para defender sus derechos, pero si para los saqueos como muestra de “protesta”. Tal parece que se terminaron las pilas de la orientación al gobierno. Donde solo unos cuantos de la sociedad civil realizan sus aportaciones e investigaciones, y no logra ser el contrapeso que el país requiere. Sin duda, la corrupción, impunidad, injusticia, falta de empleo, los costos de la vida cotidiana, salud, educación, vivienda, todo eso se resume en la marcada desigualdad social de la que es presa México desde su origen. Todo lo anterior se resume en la falta de interés por nuestro México, basta de quejarnos de lo que no se puede, de lo que no nos gustaría que pasara, de los demás, del gobierno, de todo. Hay que prepararnos, la educación es la llave de las oportunidades y el progreso, formar familias con valores, principios, con el sentido humano que nos hace grandes y valiosos, encabecemos los cambios con acciones, nos hace falta unidad a la sociedad mexicana. Nos atrevemos a juzgar la política internacional, el destino de otros países, sin darnos cuenta que la tarea número uno está aquí en nuestra casa, en nuestra nación,
¡Basta de que expresen pobre México; con tantos mexicanos y pocos ciudadanos!
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