Cual si fuera un trompo con la piola floja, a “El Güero” Alarid se le engüeró la triquiñuela cuando ya la creía ganada, no cabe duda que a los tramposos les va mal y en este caso quedó bien demostrado que “el tiro le salió por la culata” al dirigente del Sindicato de Trabajadores al Servicio de Culiacán, quien intenta reelegirse.
Y es que valiéndose de sus cochinas artimañas el nefasto líder sindical logró que el Comité Directivo del Sindicato de Trabajadores al Servicio del Ayuntamiento le pusiera una zancadilla a Eleazar Rangel Puga al negarle el registro como candidato a la dirigencia sindical del STASAC, por la planilla verde.
Como buen discípulo de Héctor Melesio Cuén, “El Güero” creó una planilla fantasma y mandó a un emisario para que hiciera el trabajo sucio.
Fue la tarde del martes 28 de febrero que Eleazar Rangel Puga acudió a las instalaciones del Sindicato, donde al presentar la documentación ante la encargada de la mesa receptora, ésta se negó a recibirla argumentando que el pasado lunes 27 de febrero otra persona se había registrado con la planilla del mismo color.
Lo anterior desconcertó al propio aspirante sindical y a sus seguidores, pero luego de algunas horas de meditar, esto no fue impedimento para que su proyecto retomara el rumbo y le diera una lección al remedo de Maquiavelo, David Alarid.
Eleazar Rangel Puga, conocido como “Chay”, puso en práctica su destreza como buen futbolista y supo parar el tiro antes de que fuera gol. Y es que este miércoles primero de marzo regresó de nuevo al Sindicato y finalmente pudo concretar su registro, pero ahora, con una planilla tricolor que en pocos minutos puso a temblar al vetusto líder sindical.
Para algunos la mezcla de colores fue una especie de presagio, pues han comenzado a correr rumores sobre una desbandada en la planilla roja que encabeza David Alarid.
Así lo supimos a través de testimonios de trabajadores anónimos quienes expresaron su malestar ante este tipo de acciones.
“David, está enfermo de poder, es un Porfirio Díaz moderno que no quiere soltar el hueso para él y los suyos. Esta última cochinada fue la gota que derramó el vaso, muchos compañeros ya no le seguimos el royo por lo mismo, la verdad queremos un cambio y con el güero no lo vamos a tener”, mencionó uno de los sindicalizados.
Eleazar Rangel Puga asegura ser ese cambio y a través de un discurso sincero, sencillo y sobre todo concreto ha venido conquistando el corazón de los sindicalizados.
«Venimos con un proyecto diferente e incluyente, trasparente, vamos por la clase trabajadora por un sindicato libre de ese tipo de prácticas, con propuestas productivas y trabajadoras, a eso venimos al sindicato a servir a la gente trabajadora», expresó.
Dicen los que saben que como un Hitler moderno “El Güero” golpeó el escritorio y renegó de la astucia de “El Chay” y sus seguidores que, lograron “jalarle la cuerda a el trompo para engüerárselo”.