Sixto Román
Navolato cumple 35 años de haberse erigido como municipio autónomo de la capital sinaloense y esta vez repiten el ceremonial de los festejos con los que se pretende hacer reconocimiento de los jóvenes valores en distintas manifestaciones de las artes y los deportes.
Rigoberto Valenzuela Medina, presidente municipal dio a conocer que los eventos inician a partir del día jueves de esta misma semana para terminar el sábado y domingo con programas que pretenden reunir a las familias en una convivencia constructiva que dibuje la parte atractiva de la sociedad y su territorio con valores importantes como el de los jóvenes creativos y destacados en las actividades deportistas; entre ellos se encuentran 10 medallistas que han logrado preseas de oro, plata y cobre.
Manifestó que en el programa hay un amplio repertorio que pretende dirigirse a lo mejor de las artes; entre estos se encuentra una muestra fotográfica, un concurso de canto en el que participan personas mayores de 55 años y que se titula “la experiencia le canta a Navolato”, desarrollado por las personas que en su tiempo de juventud vivieron la experiencia de la declaratoria por parte del Congreso del Estado de municipio autónomo.
Este municipio tiene referentes históricos importantes como la distinción por ser la potencia de las empresas sociales de la caña de azúcar; fue asiento de uno de los ingenios azucareros más importantes en la región.
El Alcalde estableció que no únicamente hay atractivos en la cabecera del municipio, sino que, Altata tiene mucho que mostrar por su variedad gastronómica con platillos a base de mariscos y sus zonas de atractivo visual entre los que manifiesta particular orgullo por haber conocido recientemente de la construcción del malecón de esa sindicatura costera.
Señala el mismo munícipe que también hay motivos de distinción por ser zona de descubrimientos arqueológicos y petrograbados, incluso, en los años recientes el Instituto Nacional de Antropología e Historia dio a conocer hallazgos importantes de unos espacios edificados por las tribus originarias; un cementerio ceremonial con urnas elaboradas en ollas artesanales y con los decorativos de colores que eran clásicos de los antecesores nativos en esta región.
Todo esto forma parte de la historia de Navolato y de lo que tendrá que desplegarse una memoria colectiva que esté enriqueciendo los distintivos referentes del municipio más joven de los 18 que hay en Sinaloa.