Redacción
Si algo le faltaba a la administración del presidente municipal de Escuinapa, Hugo Enrique Moreno Guzmán era que la tranquilidad de la que tanto presumía fuera alterada por hechos de alto impacto, que dejaron como saldo la muerte de cinco personas y cuatro heridas.
La mañana de este lunes 28 de agosto no fue la cotidiana para los habitantes de la sindicatura de la Isla del Bosque, debido a que ocho integrantes de una familia proveniente de Durango, fueron agredidos con arma de fuego, cinco de ellos perdieron la vida, algunos eran menores de edad y tres más resultaron heridos y se encuentran en un Hospital.
Este es el segundo hecho violento que se registra en el municipio sureño en menos de una semana. El primero ocurrió en la sindicatura de Palmillas, allí quedó herido un ex dirigente ejidal y productor de mango. Lo que llama la atención es que ambos ataques fueron perpetrados en las mismas condiciones por un par de sujetos a bordo de una motocicleta disparando contra sus víctimas y dándose a la fuga.
Aunque según información dada a conocer en rueda de prensa por Víctor Hugo Sánchez Mendieta, director de Seguridad Pública Municipal en el hecho de la Isla del Bosque los atacantes fueron identificados por un testigo, quien aseguró que los responsables fueron vecinos de la Mesa, Durango de donde son originarios.
No menos preocupante es lo ocurrido en Palmillas, pues pese a la gravedad del asunto el municipio buscó a toda costa ocultarlo, e incluso, confundiendo a los medios de comunicación para que dicho hecho no trascendiera. No hubo parte ni mucho menos se abrió alguna carpeta de investigación.
La situación para los escuinapenses no cambia mucho con la información que ofrecen las autoridades, pues de por sí existe un Gobierno que se preocupa más por quedar bien con un organizador de certámenes de belleza que resolver problemas tan delicados como es la inseguridad.
Con estos hechos, se constata una vez más la existencia de una administración ocurrente y de apariencia, ya que, sus titulares aprovechan cualquier situación para acaparar los reflectores y aparentar que trabajan, pero no ven lo que realmente es importante como es la seguridad de las personas.
Llama la atención la rapidez con la que el alcalde apodado “El Yiyo” acudió a atender y resolver el problema del robo de una bicicleta del singular ícono popular “La Nicol”, dejando de solucionar los problemas que sí le competen y debieran merecer toda su atención y seriedad como es el caos vial que impera en la cabecera a consecuencia de las obras mal planeadas y que tiene hartos a los ciudadanos.
La administración del Presidente Municipal actual no está teniendo el resultado esperado, aun y cuando éste se empeñe en decir que sí, pues día a día vemos a ciudadanos cansados y desesperados porque se termine todo el desastre que ha venido provocando con sus proyectos arrebatados y que no tienen fecha de conclusión y, ahora, lo que faltaba, Escuinapa se tambalea por los hechos violentos.