- La Alcaldía de Mazatlán; la presidencia de CAADES o una diputación
Xicoténcatl Barajas
Lo consideran la revelación política del momento y empieza a incomodar a los grupos caciquiles de la política tricolor que se mueven en Mazatlán y, aunque el destino lo llevó hasta esas tierras donde el pacífico es algo sin igual como parafraseara José Alfredo Jiménez el corrido a Mazatlán, Octavio Loaiza Torres tiene de “tres sopas”, porque hay quienes lo ven con “cuerpo de torero” para ser candidato a la Alcaldía del puerto; otros como presidente de la Confederación de Asociaciones Agrícolas del Estado de Sinaloa dentro de unos años, o bien, en estas pizcas electorales que se avecinan las condiciones para competir como abanderado del PRI a una diputación federal o local no es una descabellada idea para varios.
Conocido en el sur del municipio de Mazatlán por su liderazgo natural y el arrojo que lo caracteriza como un buen emprendedor en el ramo agrícola, Loaiza Torres ha logrado trasponer los umbrales del borrascoso escenario político mazatleco y posicionarse en tan poco tiempo como un cuadro fresco y sin desgaste del Revolucionario Institucional.
Hay detractores políticos que en el intento por generarle una negativa imagen al originario de Culiacán echaron a andar una maquinaria de periodistas muy oxidada, sin embargo, el empresario agrícola coincide con varios proyectos con el hombre que tose más fuerte en Sinaloa y no se amilana, por el contrario, él sabe bien con cuantas papas se hace un caldo y la olla está en su primer hervor, consciente de que en política se encuentran amigos de mentiras y enemigos de adveras, frase célebre del ex gobernador Alfonso G. Calderón y que sigue cobrando vigencia.
Las Jugadas del presidente de la Asociación de Agricultores del Río Presidio y también presidente de la Fundación Colosio en Mazatlán parecen estarle saliendo redondas, ya que, después de años logró con el apoyo del gobernador, Quirino Ordaz Coppel y de la diputada Irma Tirado Sandoval que el Congreso del Estado modificara algunos artículos de la Ley de Asociaciones Agrícolas del Estado de Sinaloa y así poder incluir a la AARP en el Consejo de CAADES, de ahí la conjetura de la posibilidad de dirigir a los productores del sector privado cuando Ulises Robles Gámez haya cumplido su periodo por el cual fue electo, pues hay que recordar que son los tiempos del sur.
En lo que respecta a la candidatura por la presidencia municipal de Mazatlán hay quienes se la quieren endilgar, aunque Octavio Loaiza puede ser un buen emergente, dada la convulsión política que existe en las lides del PRI donde ya se dan hasta con la cubeta en vísperas del 2018.
Y en relación con los comentarios que se vierten en los corrillos políticos de que ya trabaja en la promoción y posicionamiento de su imagen en aras de aparecer en las boletas como abanderado a una diputación federal o local, Octavio Loaiza hace mutis cuando es cuestionado al respecto, sin embargo, el trabajo de tierra que despliega por sindicaturas y rancherías de Mazatlán desde la mañana hasta en la noche toda la semana, e incluso, sábados y domingos dan mucho de qué hablar y generan celo político.
