Los dirigentes del Congreso Agrario Permanente (CAP) se deslindaron de las acciones del pasado 14 de Febrero de los corrientes en el arranque de la Expo-Agro, que ocasionó un arranque irregular.
Aunque a la vez, terminaron por justificar la protesta de los agricultores, al exponer la grave crisis del sector social, que ha visto una total falta de liquidez, debido a la ausencia de cumplimiento por parte de Sagarpa y que los precios de las cosechas se han derrumbado en los últimos años, dijo Agustín Espinoza Lagunez.
El coordinador en turno del CAP, declaró que horas antes de iniciar la fiesta agropecuaria ellos se encontraban en reunión con el gobernador, Quirino Ordaz y el subsecretario de la Sagarpa, Jorge Armando Narvaez y ahí se habían alcanzado algunos acuerdos, aunque aceptó de forma implícita que los productores llevados a los terrenos de la Sagarpa rebasaron a los dirigentes.
Sostuvo a manera de justificación de la protesta y boicot al presídium donde se preparaba la inauguración, que los verdaderos culpables de que se presenten estas manifestaciones son las autoridades, principalmente el Gobierno Federal, por no atender los problemas del campo, pues ya estaban advertidos de la gran inconformidad de quienes forman parte de este sector, sin embargo no creyeron que pudieran tomar estas medidas y no había prestado la atención necesaria ante esta situación.
Fue secundado por Ocadio Garcia, quien acusó a los esquemas de la Sagarpa por el Estado de desastre que vive en sector social de la agricultura, pues no se definen esquemas de apoyo ajustados a los vaivenes de los precios y líneas de mercado de los productos. Este desastre, comentó, se viene arrastrando desde cinco años atrás.
Ahora, según planteó, se buscará la interlocución de la Sagarpa Federal para buscar propuestas y alternativas en forma coordinada, aunque uno de los principales problemas es la burocracia con que operan las delegaciones de la Secretaría, dijo.
