- Los señalamientos fueron todos contra todos
Redacción / ¡Aquí… Política con Tambora!
La oportunidad para exponer al electorado sus propuestas fue utilizada por algunos candidatos a la presidencia municipal de Culiacán para “bombardearse” mutuamente con señalamientos y ataques de lodo.
Los más activos fueron Jesús Estrada Ferreiro y Roberspiere Lizárraga, mientras que Jesús Valdés hizo gala de una buena defensa y matizó sus obras y proyecto.
Por su parte Carlos Arturo García, el del Partido Independiente no figuró en este primer duelo político y aunque buscó llamar la atención con señalamientos contra uno u otro candidato, nadie le prestó importancia.
Hubo algunos intentos por dar a conocer las propuestas, pero la dinámica terminó enfrascando a los candidatos en un duelo de señalamientos el cual fue iniciado por Jesús Estrada Ferreiro, candidato de la coalición “Juntos Haremos Historia” (PES, Morena y PT), quien primeramente dirigió su “artillería” contra Jesús Valdés y Robespierre Lizárraga Otero, a quienes acusó de complicidad por haber formado parte del mismo gobierno en 2017 y parte del 2018.
“Estuvieron gobernando, no hicieron nada y hoy quieren cambiar las cosas otra vez, lo cual es una farsa, ¿quién va a creer en ellos?”
Cuando el de Morena intentaba hilvanar una propuesta referente a un sistema de trasporte moderno para Culiacán, nuevamente le ganó la calentura de los señalamientos y arremetió contra los gobiernos pasados, incluyendo el de Valdés Palazuelos:
“Ni los gobiernos de ahorita ni los del pasado han tenido la visión de estadistas, de futuro. Han tenido la visión de negocio solamente, y lo hacen cada trienio para poder cobrar los moches, porque de eso es de lo que viven, de los moches”.
Asimismo, no perdió la oportunidad para recordarle a Robespierre el uso electorero que durante años le han dado a la UAS a favor y beneficio del Partido Sinaloense. Jesús Valdés mostraba una sonrisa que denotaba confianza mientras que a Robespierre Lizárraga, se le notó que le caló el señalamiento por lo que no tardó en hablar de impuestos, pero no de aquellos que se cobran sino de los de carne y hueso:
“El candidato de Morena ha sido impuesto tres veces, quien debió haber sido dirigente de ahí fue Jaime Palacios, quien debió haber sido candidato a Gobernador fue el ingeniero Ríos Rojo y quien debió ser candidato a presidente municipal fue el licenciado Francisco Javier Martínez, ese es el candidato de Morena, impuesto”.
El candidato de “Por Sinaloa al Frente” (PAN, PRD, MC y PAS), replicó la técnica de Anaya y comenzó a sacar gráficas para luego señalar a Valdés Palazuelos, destacando que durante su año de gobierno en Culiacán los índices de violencia repuntaron significativamente.
“Jesús Valdés promete lo que no cumplió, pero vean estas terribles cifras: 35 por ciento más que el 2016 los homicidios en 2017 en Culiacán, ¿acaso queremos más de lo mismo?; los feminicidios, terrible cifra, terrible: 98 por ciento más que en 2016, 254 más respecto a la media nacional, además el robo de vehículo, Culiacán, capital del robo de vehículos”.
Jesús Valdés continúo sonriendo y no tardó en refrescarle la memoria al pasista:
“Le recuerdo que cuando mandaban tú y tu jefe en el Ayuntamiento de Culiacán, en el 2011, se dispararon los delitos y las incidencias delictivas, fue a mí a quien me tocó implementar un programa de austeridad y reestructurar la deuda de largo plazo que ustedes y un servidor hemos estado pagando, además en delitos de alto impacto, yo logré disminuirlos en 10 por ciento en comparación de esa administración que ustedes encabezaron”.
Tras darle su respuesta a Robespierre y haciendo gala de la frase que dice: “la mejor defensa es el ataque”, Valdés Palazuelos le recordó a Estrada Ferreiro las acusaciones en su contra por presuntamente haber desviado una suma millonaria del presupuesto de campaña en 2016. Después de su participación, tanto al de Morena como a Lizárraga Otero se les frunció el ceño.
La dinámica no dio tregua a las propuestas, se asomaron muy pocas y ganó el morbo por ver quien tenía la cola más larga, al final, todos proclamaron ganador a su candidato, todos festejaron a su modo y todos se dijeron cercanos al puntero a quien pese a los ataques constantes nunca le pudieron borrar la sonrisa.