- En pleno día de la Libertad de Expresión le fue entregado un citatorio de parte de la Fiscalía General del Estado.
Redacción / ¡Aquí… Política Con Tambora!
Si la situación para la actual administración municipal dirigida por la alcaldesa de Escuinapa, Fernanda Oceguera Burquez está por demás difícil dado a los múltiples escándalos que se han generado desde que ésta asumiera las riendas del Municipio, parece que las cosas se están complicando luego que una de las regidoras del Ayuntamiento demandara a la periodista de Noroeste, Carolina Tiznado por haber publicado información de un supuesto préstamo que recibió Dora Virginia Guerrero, esposa del ex presidente de la Confederación Nacional Campesina Local, Porfirio Salas Castillo y protegido del Diputado Federal, Germán Escobar.
El asunto no fuera de mayor trascendencia si éste no hubiera sido entregado precisamente el día en que los periodistas celebran el privilegio de informar a la sociedad temas diversos, entre ellos el mal uso de los recursos públicos, recursos emanados en su mayoría si no es que todos de los impuestos que pagamos como ciudadanos.
Realmente es una vergüenza la denuncia presentada por la regidora del PRI, ya que, podemos asegurar (aunque nos expongamos a una demanda y más) la trayectoria de su marido, quien no se ha desempeñado precisamente con honorabilidad en los distintos cargos que ha ostentado, por el contrario, en todos ha salido señalado, si no pregunten a los ejidatarios y miembros de la CNC.
La compañera Carolina Tiznado fue citada a comparecer ante la Sala de Mecanismos Alternativos del Centro de Justicia de la Zona Sur para que atienda el conflicto con la regidora del PRI del Ayuntamiento de ese municipio, lo que demuestra su intolerancia y la falta de oficio político para enfrentar un señalamiento que bien pudo terminar al acercarse con ésta para aclararlo, pero, de lo que carecen los regidores es de criterio y sentido común.
«A fin de atender un conflicto en el cuál se le involucra y existe petición de la C. Dora Virginia Guerrero a efecto de llevar a cabo una sesión inicial», se lee en el documento girado por la Fiscalía General del Estado.
En mayo pasado, la periodista dio a conocer acerca de un préstamo que fue confirmado por el mismo tesorero Enrique Lizárraga fuera de micrófono a los regidores del PAN, Edith González; del PRI, Luis Miguel Corona Contreras, y del PRI, Rogelio Padilla Salcido, así como de la demandada, el problema es que éstos se dieron por aludidos y buscaron explicar a su modo claro está y en un programa de revista el asunto amenazando con demandar, ya que, según ellos estaba siendo afectada su moral, lo que da más risa que pena.
Lo raro fue que la más molesta de la acusación fue la regidora del PAN y que precisamente se le comprobó con documentos filtrados por tesorería el préstamo lo que habla del cinismo y la falta de capacidad que tiene para reconocer sus errores.
Pareciera que el tema no pudiera traer demasiadas consecuencias si las cosas hubieran sido agotadas en términos amistosos, sin embargo todo parece apuntar a que a la regidora la “chamaquearon” y la están utilizando para irse en contra de los medios de comunicación, por lo que, no es difícil pensar que al final el engrudo terminara por hacerse bolas y sería ella y su marido Porfirio Salas “El Chocolón” los más perjudicados.
Quien debería estar preocupado es el tesorero municipal, que si bien es cierto cuenta con mucha capacidad en cuanto a la fiscalización, la realidad es que se está prestando a los juegos de la Alcaldesa en cuanto el manejo de los recursos públicos y si al final de cuentas existen irregularidades en su aplicación debe considerar que esto es un delito y en un momento dado quien termine en la cárcel será él y no la sobrina del delegado regional de la Secretaría de Gobernación, Rafael Oceguera Ramos.