*El gobernador Quirino Ordaz Coppel reconoció la trayectoria de desarrollo e impulso educativo que el ex gobernador dio al estado
El Gobierno del Estado de Sinaloa rindió un homenaje al ex gobernador Antonio Toledo Corro, acaecido la semana pasada en Mazatlán, y quien dirigió los destinos del Estado entre 1981 y 1986, dejando importante legados, sobre todo en el ámbito educativo, con la creación del Colegio de Bachilleres del Estado de Sinaloa (Cobaes) y la Universidad de Occidente, ahora autónoma.
El gobernador Quirino Ordaz Coppel, acompañado por su esposa, Rosy Fuentes de Ordaz, encabezó una guardia de honor ante un cuadro de don Antonio Toledo Corro, colocado en la explanada de la planta baja de Palacio de Gobierno, guardia en la que también se sumaron los ex gobernadores de Sinaloa, Fortunato Álvarez Castro, Juan S. Millán, Jesús Aguilar Padilla, y Mario López Valdez.
En su mensaje, Ordaz Coppel destacó que don Antonio Toledo Corro fue un político total que recorrió exitosamente las complejas escalas del sistema político mexicano con éxito y reconocimiento como un gran emprendedor, pero mejor ejecutor, siendo un coloso para el trabajo, tan es así que el entonces presidente Adolfo López Mateos lo reconoció y le entregó el premio como mejor alcalde del país, aunque también fungió como diputado local y federal, y secretario de Estado.
Al enumerar sus logros, dijo que destacan la infraestructura, educación y transformación profunda de las cabeceras municipales, como una herencia de su administración, además de la creación del municipio de Navolato, el dragado en los esteros del sur que elevaron la productividad de la pesca, la carretera Mar de Cortés con una inversión directa.
También más de 150 escuelas secundarias por cooperación que existían en la entidad en ese entonces y eran pagadas por los padres de familia fueron incorporadas al sistema educativo estatal para acceder y cumplir el mandato constitucional de una educación gratuita.
El Gobernador del Estado recordó que Antonio Toledo fundó el Colegio de Bachilleres y la Universidad de Occidente como vasos comunicantes entre la educación media y la superior, la última con el rango de autónoma con plena independencia administrativa y política y sin ninguna intromisión del poder político.
Estas dos instituciones educativas, afirmó, cumplen con su elevada misión de impartir el bachillerato con calidad y la universidad brinda una educación incluyente, pertinente y en condiciones de acceso por igual a todos los estratos sociales del estado.
“Señoras y señores, don Antonio Toledo Corro vivió intensamente con la pasión y el temperamento de un hombre de extraordinaria fuerza mental. Fue tenaz en sus ambiciones y realizador pleno de sus aspiraciones. Cultivó a los amigos como el valor supremo de su vida, la amistad la sembraba una vez y para siempre, la honraba y lo honraban, su testamento de vida es un ejemplo ciudadano y su condición de político es un referente de triunfos. Perdemos a un gran sinaloense, a un gran mexicano, a un gran padre y ser humano, a un gran amigo, pero ante todo a un gran hombre. Muchas gracias, arriba «El Tigre» Antonio Toledo Corro”, concluyó.
A nombre de la familia, su hijo, Antonio Toledo Ortiz, agradeció la realización de este solemne homenaje hacia su padre, quien toda su energía la dedicó a construir para hacer un Sinaloa mejor.
“Ha dejado una huella, es todo un ejemplo para las nuevas generaciones que tuvimos una gran oportunidad de educarnos, él solamente pudo hacer la primaria, pero aun así se labró poco a poco hasta llegar a trascender con la obra que hizo como gobernador y también como ser humano y padre de familia”, señaló.
Al homenaje asistieron cientos de personalidades del mundo de la política, senadores, diputados, alcaldes, además de familiares, hijos y nietos, y correspondió al ex magistrado de Justicia, Jorge Romero Zazueta, quien previamente fue su cercano colaborador, hacer una breve semblanza del ex gobernador Antonio Toledo Corro, el también llamado cariñosamente “Tigre de Escuinapa”.