- Rindió su primer informe al frente del organismo hidroagrícola del valle del Évora.
Xicoténcatl Barajas
Lo que por años pareció imposible se hizo realidad; el rescate del módulo de riego que estuvo “secuestrado” por dos grupos que se disputaron el control del agua y que llegaron al grado de paralizarlo por completo dejando a los productores usuarios pérdidas millonarias en sus cultivos con cosechas de bajo rendimiento y mala calidad.
Los traficantes del agua que en su momento tomaron por asalto al módulo para buscar posiciones políticas y saciar apetitos personales y grupales ya no están. Ahora es Wilfrido Bejarano Lerma quien hace un año asumió la dirigencia y el que ha logrado encontrar el punto de equilibrio y poner a salvo tan importante organismo hidroagrícola del valle del Évora.
Lo rescató de un embargo millonario que pretendieron ejecutar empleados y proveedores por incumplimiento de pago a sus prestaciones y servicios, pues derivado de su disfuncionalidad en la que lo dejaron caer los grupos en disputa las deudas se fueron acrecentando hasta llegar al grado de ser impagables.
Cuando estaban a punto de ahogarse, los auténticos productores del sector social y privado decidieron agarrar “el toro por los cuernos” y hacer a un lado a los grupos de choque y buscaron a un buen líder que tuviera afinidad con propios y extraños, surgiendo así el liderazgo de Bejarano Lerma, mejor conocido en la región como “El Pule”, quien antes había desempeñado el cargo de presidente de la Asociación Ganadera Local, dejando constancia plena de su buena gestión en favor de los ganaderos. Los resultados son visibles, ahí está la edificación de las instalaciones de la AGL que no mienten.
Atrás quedaron los enconos y trifulcas escenificadas en las que hasta las manos del gobernador de aquellos años estuvieron metidas y que utilizando la fuerza pública cumplió los caprichos viscerales de un reducido grupo.
Mientras que por otro lado, las huestes de otro siniestro también querían a rio revuelto ganancias de pescador y aventaron la atarraya, sin embargo, fue mucho el desgaste hasta que los verdaderos perjudicados estuvieron a punto de levantarse en armas y decidieron enfrentarse con el poder oficial y con el de los traficantes del agua.
A un año eso es historia, pues Wilfrido Bejarano con su capacidad de gestión, liderazgo genuino y ganas de trabajar por sus representados presentó en su primer informe como Presidente un desglose de los logros alcanzados y de las metas y también habló de los retos que vienen. Con ello, se nota la nueva imagen y visión diferente del módulo 74-1.
“Quise hacer algo diferente a lo que tradicionalmente se hace” contestó a la pregunta de quien esto escribe al ser entrevistado previo a la asamblea ordinaria en la que con la frente en alto daría a conocer los resultados de su gestión a los usuarios.
En su periodo –admite- que se ha mantenido neutral y que los intereses del módulo son el pilar fundamental para llegar a pasos agigantados hasta donde están en la actualidad.
“El Pule” Bejarano dice y asegura que los trabajos de conservación y operación que exige la Comisión Nacional del Agua fueron rebasados en más del 100 %. Hay compuertas nuevas, revestimiento de canales, maquinaria reparada, eficientización del agua y, sobretodo, un trato digno al productor.
“En un año no tuvimos ningún tropiezo, continuamos con las prioridades en los más de 300 kilómetros de drenes”, añadió en la entrevista el líder.
En el sentido de que hay la intención de parte del presidente electo de México, Andrés Manuel López Obrador por devolver los módulos de riego al Gobierno, Bejarano con mucho conocimiento de causa y muy calculador no se anduvo por las ramas y contestó a su muy peculiar estilo que pudiera ser un retroceso la pretensión, pero que si hay cambios pues que sean para mejorar, aunque dejó en claro que la mayor parte de los recursos que administran son de los usuarios y menos los del Gobierno.