Redacción / ¡Aquí… Política con Tambora!
- Culiacán ya tiene un nuevo Presidente Municipal y éste tuvo un arribo muy accidentado a la comuna.
Jesús Estrada Ferreiro decidió cerrar la Avenida Álvaro Obregón, situación que no ocurría desde 1989, cuando Lauro Díaz Castro rindió protesta como Presidente Municipal de Culiacán, aquella ocasión en que los panistas liderados por Rafael Morgan Ríos y Mercedes Murillo Monge quemaron el Palacio Municipal aludiendo un fraude electoral por parte del Gobernador de la época, Francisco Labastida Ochoa, avalado por el ex presidente de México Carlos Salinas de Gortari que dio pie a las alternancias políticas.
Obstaculizar la arteria más importante de la ciudad en plena quincena y Halloween, le pegó directamente a los comerciantes, pero fue un golpe letal para los conductores que permanecieron varados durante horas en el tráfico vial.
El pitar de los carros y “las mentadas de madre” no se hicieron esperar contra el nuevo edil municipal, posteriormente los primeros en llegar al evento fueron grupos manifestantes de policías y comerciantes, quienes le exigían al nuevo Presidente atención al Parque de las Riberas y el pago de jubilaciones atrasadas desde hace años a gendarmes en retiro.
Durante su discurso, Estrada Ferreiro, aseguró que terminará con el problema de inundaciones en Culiacán, revistiendo arroyos y canales como se hace en países de primer mundo, pese a que la recaudación e ingresos de la comuna son de cuarta.
Nuevamente advirtió que pasará tijera contra los aviadores del Ayuntamiento y será implacable para que estas prácticas no se repitan.
Cabe destacar que el evento careció de una buena organización, lo que provocó que varios invitados especiales, concesionarios de radio, gerentes y empresarios en general, mejor se retiraran debido a que otras personas ya les habían ganado las sillas y terminaron quedándose parados.
Llamó la atención que los medios de comunicación fueron limitados a cubrir dentro de un corral o cerco de seguridad, donde se vio obstruido su trabajo como parece que así será durante todo el trienio.
Eso sí, el nuevo Alcalde utilizó una pantalla gigante para promocionar su imagen e incluso cámaras de alta tecnología y drones para darle realce al evento, que en realidad no logró convocar a las personas que se tenían previstas, ya que, muchas sillas quedaron vacías y la Culiacán capital trastornada.