- Jelle Van Loon destaca la labor extensionista de la iniciativa MasAgro y sus colaboradores, enfocada a mejorar la calidad de vida de los agricultores del país, así como la calidad de los productos cosechados
A través de la iniciativa MasAgro, el Centro Internacional de Mejoramiento de Maíz y Trigo, en coordinación con el Gobierno Federal, busca mejorar la nutrición y la salud de la sociedad mediante la producción sustentable.
Al presentar la conferencia “Innovación en Sistemas Agroalimentarios para Nutrición, Conservación de Medio Ambiente y Seguridad”, Jelle Van Loon, Coordinador de la unidad de mecanización del Centro Internacional de Mejoramiento de Maíz y Trigo, explicó que para lograr lo anterior se deben implementar programas de innovación y cambio en la producción de alimentos.
En su participación, durante la segunda edición del Agroinnova 2019, expresó que millones de personas que habitan el mundo sufren de hambre, por lo que el CIMMYT se ha enfocado en abatir el hambre mediante el impulso a la producción de maíz, trigo y granos básicos para la alimentación en el mundo.
Añadió que México afortunadamente ha logrado disminuir el problema impulsando técnicas como la Agricultura de Conservación, y proyectos enfocados en abastecimiento responsable, como es el caso del programa que se trabaja en Sinaloa con la empresa Kellogg y Sacsa.
La estrategia, dijo, busca fortalecer un compromiso entre el sector privado y público, trabajando directamente con productores grandes y pequeños, mediante recomendaciones agronómicas sustentables y la búsqueda de oportunidades de mercado.
“Queremos luchar contra la desnutrición, proteger el medio ambiente y fortalecer la seguridad alimentaria nacional”, aseguró.
Agregó que el CIMMYT cuenta con el banco de germoplasma de semillas de maíz más grande del mundo resguardando casi 28 mil diferentes variedades, además de 140 mil variedades de trigo.
Esta biodiversidad, indicó, es aprovechada para detectar diversas características de las plantas, según las necesidades requeridas por el productor y el consumidor.
Por último, Van Loon ejemplificó el caso de Sinaloa, en donde se ha logrado incrementar el impacto a través de áreas de extensión en 5.6 veces más, impulsando la adopción de tecnologías y técnicas de producción sustentable, reduciendo el costo de producción de Maíz hasta en 5 mil pesos por hectárea.
