A.B.Z.
Jaime Montes Salas
…Bien coordinado
En Sinaloa se le dio vuelta a una página del libro político y se empezó a escribir una nueva historia entre el presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador y Quirino Ordaz Coppel, gobernador Constitucional del Estado de Sinaloa, así, a ojos de todos los sinaloenses se mandaron mensajes de unidad y de trabajo en conjunto. El primero de ellos fue en el ex real de minas del Tajo, municipio de El Rosario, tierra natal de la presidenta de la Junta de Coordinación Política del Congreso del Estado, Graciela Domínguez Nava, quien no estuvo presente. Allí, el mandatario de la nación expresó contundente: “exijo respeto para el gobernador Quirino Ordaz, quien se ha portado muy responsable con nosotros”, para horas más tarde en Culiacán, en la explanada del Palacio de Gobierno pronunciar con claridad y sin tapujos: “voy a regresar a Sinaloa, voy a estar constantemente recorriendo Sinaloa con el gobernador Quirino Ordaz que, es un buen gobernante, un hombre responsable, y si no les gusta, no me importa, yo siempre digo lo que pienso, mi pecho no es bodega”.
Graciela Domínguez Nava
…Ausente
Así, AMLO fortaleció políticamente al mazatleco que en meses pasados fue víctima de un linchamiento político por parte de las huestes morenistas, en especial por los diputados que comanda la líder de la JUCOPO, a quienes se les señaló en su momento de ser los responsables de incitar a la convulsión en el Palacio Legislativo llevando grupos disidentes desde varios tópicos de la entidad para arremeter contra las bancadas opositoras que allí convergen, convirtiendo el recinto parlamentario en un verdadero circo, además, que hasta en contra del delegado de programas federales Jaime Montes se fueron cuando trató de mediar en el tema del presupuesto del Estado, el cual, fue vetado por el gobernador Quirino Ordaz Coppel después de una aprobación que arguyeron las minorías como ilegal, hasta llegar a acuerdos después de intervenir el Presidente de México en el tema y “plancharlo” para que fuera aprobado con las modificaciones que se le hicieron a las reasignaciones que caprichosamente antes los legisladores trataron de imponer. Así, la mano López Obrador golpeó la mesa mostrando su madurez en estos menesteres y diciéndoles con ello a sus corifeos que el jefe político en la tierra de los once ríos es el Gobernador y que también tendrá la llave de la Presidencia para cualquier gestión, pues la coordinación que existe entre Quirino y el delegado de programas federales es muy estrecha y buena, así se notó en la gira presidencial, por lo que nadie se deberá brincar las trancas de estas dos piezas del ajedrez político….Y nos despedimos con decir que: ¡La Libertad de Expresión es Nuestra Mejor Arma de Justicia Social!
