Redacción
Con la presencia de más de la mitad de los 113 consejeros integrantes del Consejo Estatal del PAN, máximo órgano de decisión al interior de dicho instituto político, se llevó a cabo la asamblea para desahogar dos puntos fundamentales en su vida interna.
El primero fue el acuerdo para la sucesión de la dirigencia estatal actual que se mantiene de manera extraordinaria, toda vez que su periodo debió concluir a principios del año.
Marko Cortes, dirigente nacional del PAN dejó en claro el compromiso que los órganos directivos y de decisión del partido serán electos por la militancia y lo sucedido en conocido hotel de la capital sinaloense acercó más el proceso de elección de la dirigencia.
El desgate del grupo liderado por Adolfo Rojo Montoya es evidente y para este consejo intentaron crear vacíos y ausencias con el fin de evitar el quorum necesario para se convocara a una elección de nuevo dirigente.
El segundo acuerdo de relevancia fue la aprobación de presupuesto para entregar recursos a los comités directivos municipales y pasar de un 30% a un 40% las prerrogativas, reduciendo con ello el recurso de la dirigencia estatal. Cabe recordar que 14 de 18 dirigentes municipales han externado públicamente su rechazo a la actual CDE que los tenía prácticamente “ahorcados”.
El triunfo de la oposición en estos acuerdos demuestra que los panistas que se oponen al dirigente estatal Sebastián Zamudio y su líder moral o manipulador Adolfo Rojo ganan espacios importantes y están a un paso de sacarlos de la dirigencia y los órganos de control del partido.
Cabe señalar, que la mayoría de los dirigentes municipales, consejeros estatales y el único alcalde panista de Sinaloa, Manuel Antonio Pineda Domínguez mantienen un lucha abierta para cambiar la dirigencia que tanto daño ha hecho al partido por convertirse en una institución que gana en las derrotas, porque sus líderes solo piensan en llegar al poder por la vía de las plurinominales.
Desde hace meses, en el sur de Sinaloa comenzó un movimiento estatal que ha cobrado relevancia y sembrado esperanza en la militancia blanquiazul porque busca reivindicar los valores humanistas y sociales de Acción Nacional, exigiendo que el partido regrese a ser un instrumento para la participación de los ciudadanos, que abandere las causas más justas y acabe con el cacicazgo de una institución que se prestó a la corrupción desde adentro.
En próximas fechas la Comisión electoral recién conformada emitirá la convocatoria de acuerdo con los lineamientos estatutarios y se esperará que la Comisión Nacional de elecciones comience formalmente con el proceso de elección interna, donde todo apunta a que será la oposición de la dirigencia actual quien domine en las urnas.