Redacción
El alcalde de El Rosario Manuel Antonio Pineda Domínguez y el líder sindical José Omar Bastidas Gómez hicieron historia en el Congreso del Estado, al comparecer juntos por acusaciones de nepotismo hechas por la bancada de Morena.
Como si fuera un torneo de ping pong, ambos hicieron frente a varios señalamientos relacionados a la creación de 30 nuevas plazas en la comuna, las cuales a decir de los legisladores fueron autorizadas irresponsablemente debido a que El Rosario atraviesa una severa crisis financiera.
El edil respondió que basificar a estas personas fue un acto de justicia social, ya que eran trabajadores de confianza que durante años habían estado esperando este beneficio por parte de la comuna.
Asimismo, Pineda se defendió de una serie de acusaciones de la morenista, Beatriz Adriana Zárate Valenzuela, quien por consigna del legislador Marco Zazueta lo acusó de traficar influencias y beneficiar a personas allegadas a él; Citó nombres como el de Martha Castillo, quien fuera alcaldesa interina, Cleofás Lora, de las personas más cercanas al panista durante la campaña, así como a Ana Karina Benítez Ramírez, cuñada del alcalde.
Sin embargo, al parecer la Comisión de Fiscalización que encabeza Marco Zazueta no hizo bien su chamba, pues no se dio cuenta que las personas mencionadas fueron incorporadas en administraciones anteriores, tal y cual defendió Pineda.
«Desgraciadamente quienes hicieron estos señalamientos tienen aspiraciones políticas y nosotros lo entendemos: los 30 trabajadores que hay en el ayuntamiento eran de confianza, ya estaban en la nómina del ayuntamiento, solo pasaron a ser sindicalizados, y lo hicieron con el salario que tenían, lo demás es pura grilla barata», defendió el edil.
Pineda Domínguez pidió al Congreso el mismo trato para los 18 alcaldes y se investigue un posible nepotismo en los ayuntamientos de Culiacán, Mazatlán y Ahome, los cuales hasta el momento han sido protegidos por el grupo parlamentario de Morena.
