Redacción
Hoy como nunca hay inconformidad, malestar y decepción entre los elementos policiales de Culiacán, pues a diferencia de otras administraciones municipales, el gobierno del morenista Jesús Estrada Ferreiro los ha tratado con desdén y hasta con cierto dejo de burla.
Si bien, para nadie es deshonra tomar un trapeador y una escoba, Estrada Ferreiro abusó de la confianza de los agentes y desde el comienzo de su trienio los puso a barrer las calles y a realizar labores propias a otras áreas como la de Aseo y Limpia.
Lo anterior fue motivo de crítica ciudadana pues mientras que los guardianes del orden estaban ocupados desempolvando banquetas, los delincuentes se paseaban a diestra y siniestra armados por la ciudad.
Por si esto fuera poco, el edil de la 4T no ha querido recibir a viudas de policías municipales quienes quedaron en el desamparo tras la muerte de sus maridos.
No en vano los agentes en activo se pusieron de acuerdo para no acudir al festejo del Día del Policía organizado por el Ayuntamiento de Culiacán, pues una imagen que circuló en redes sociales así lo confirma.
Dicha fotografía fue tomada días después de las polémicas declaraciones de Estrada Ferreiro, en relación a que no estaba de acuerdo con aumentarles el sueldo a los agentes municipales pero que por disposiciones legales tenía que hacerlo.
Los “metros”, como se le dice a los agentes en el argot policiaco, estaban bastante “enchilados” por los comentarios de Ferreiro y de acuerdo a fuentes confiables no faltó el que quiso ponerle unos guamazos por hablador.
Sin tocarse el corazón, el Presidente Municipal los llamó grillos al exigir lo que por derecho les corresponde.
«Que se manifiesten, quien no esté conforme que se vaya, no podemos tenerlos a fuerza ni tampoco tenemos porque darles más allá de lo que podemos y lo que les corresponde legalmente; si alguien está alborotando la gente, esa persona sí se va ir, lo vamos a ver, sabemos dónde está el asunto, y cualquier persona, no importa el grado que tenga, el rango, si está generando inconformidades, propiciadas por grillas, se va ir, lo vamos a cesar», advirtió el edil el pasado 6 de junio durante un evento en las instalaciones de la Secretaría de Seguridad Pública y Tránsito Municipal de Culiacán.
Horas más tarde el Presidente se tragó toda su palabrería cuando vio la fuerza organizada de los agentes que le había armado un mini golpe de Estado. Aunque puede parecer chusco y hasta motivo de broma, se trata de un asunto delicado pues estamos hablando de las fuerzas municipales que resguardan la capital de Sinaloa.
¿Se imagina usted que la milicia deje plantado al presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, quien funge como el máximo comandante de las Fuerzas Armadas?
Algo similar ocurre a una menor escala con el tango que los “metros” le hicieron al munícipe, uno que puede volver a ocurrir en cualquier momento e incluso en una situación de riesgo.
¿Qué policía trabaja conforme cuando su máximo líder en el escalafón le está diciendo grillo?
¿Cómo hacerlo si ve que los policías jubilados no encuentra justicia laboral?
¿Cómo cuando ven el trajinar diario de las viudas reclamando en vano lo que les corresponde?
¿Cómo piensa en salvar a los demás cuando apenas puede llegar al fin de quincena?
Son solo algunas de las inquietudes que nuestro medio informativo ha recogido con agentes municipales que aseguran no sentirse representados por Estrada Ferreiro, a quien acusan de insensible e inhumano.
