- Para nadie es secreto que Estrada Ferreiro arrancó su administración con el pie izquierdo y hoy parece haber perdido “el juicio” completamente
Redacción
Dicen que “el saber y la razón hablan mientras la ignorancia y el error gritan”, así lo entienden aquellos que por una u otra circunstancia han tenido que convivir con Jesús Estrada Ferreiro, quien se ha destacado no por su trabajo, sino, por su actitud soberbia y altanera.
A dos meses de cumplir un año de gobierno, su aprobación sigue desplomándose como vomito de buitre cayendo directamente desde las alturas, pues en recientes días figuró entre los alcaldes peor calificados con apenas un 15.2 por ciento.
De acuerdo a la encuesta Massive Caller, el edil morenista sólo está debajo de los alcaldes Xicoténcatl González, de Victoria, Tamaulipas, con 13.8 por ciento; Marco Novelo, de Ensenada, con 13.9 por ciento y de Elvira Paniagua, de Celaya, con un 15.1 por ciento.
Para nadie es secreto que Estrada Ferreiro arrancó su administración con el pie izquierdo, declarándole la guerra a sectores clave para el desarrollo de la capital sinaloense.
El primer pleito fue con los medios de comunicación, sus dueños, concesionarios y luego con quienes laboran en éstos.
El segundo encontronazo fue con los empresarios al quitarles los Certificados de Promoción Fiscal y desalentar la inversión y creación de nuevos empleos.
Al más puro estilo de un protocolo de auto sabotaje, lo tercero que hizo el edil fue pelearse con los pequeños comerciantes: vendedores, taqueros y locatarios que distribuyen productos regionales a lo largo y ancho del casco urbano.
Pero sin duda, lo que más ganó fue la antipatía de la sociedad el pasado 5 de septiembre cuando la falta de atención en los desperfectos de la infraestructura pública cobraron la vida de una joven durante las lluvias torrenciales. Una bocatormenta en mal estado, reportada y no atendida por el municipio enlutó a una familia entera y conmocionó a los culiacanenses quienes expresaron su malestar en redes sociales.
Por si esto fuera poco, el edil mostró su peor rostro al verse cuestionado por un periodista.
“¿Dónde estuvo inspección y vigilancia durante todo este tiempo?”, le inquirió el valiente comunicador que colmó la paciencia de Estrada Ferreiro al punto que éste le respondió:
“Quieres lana para que te calles la boca”.
Aquello quedó grabado en una transmisión en vivo y vídeos que circularon en redes sociales que fueron más leña en el fuego de la indignación y coraje ciudadano. Ello nos recuerda la siguiente frase del historiador griego Tácito: “quien se enfada con las críticas, reconoce que las tenía merecidas”. ¡Aguas Estrada Ferreiro! ¡Ahí te hablan!
De acuerdo a fuentes confiables dentro de la comuna, el escándalo de Alejandra y el pleito con el comunicador, fueron motivo de constantes reuniones entre los asesores del Presidente y personal cercano a su gabinete quienes buscaban una salida a esta crisis hasta que coincidieron en darle la vuelta al contexto: sacar raja a las manifestaciones excesivas de Salomón Monárrez quien lo acuso de asesino y asumirse como víctima de un linchamiento mediático para poder reaparecer en público.
Para ello, dijo la fuente anónima: serían de vital importancia las redes sociales y medios amigos, es decir, tendría que invertir en espacios de radio, televisión y medios impresos para poder explayarse en entrevistas a modo sin ser cuestionado y así limpiar su imagen pública.
Algunos de éstos medios “amigos” le dieron línea a sus reporteros para que apacharan al edil y contribuyeran al nuevo enfoque que supuestamente le ayudaría a limpiar su imagen. A pesar de ello, quedó demostrado que el peor enemigo de Estrada Ferreiro es el propio Estrada Ferreiro, ya que lejos de aprovechar estos espacios para mostrar un lado más amigable, lo primero que hizo fue declarar que limitaría sus entrevistas banqueteras.
Al ser cuestionado sobre su intención de reservarse el derecho a contestar y ser más selectivo, el edil culiacanense respondió:
“Sí, sí, depende a quien, a quien me esté cortando las entrevistas, ósea lo que yo quiero aclarar, si me preguntan algo, lo aclaro y no lo ponen pues simplemente mejor no les contesto, porque no se vale”.
¿Y ya los va a identificar?, preguntó una reportera obteniendo una ridícula respuesta del edil.
“Sí. Ya los tengo identificados. Tú… tú no eres una de ellas”
Tras las carcajadas de los “amigos”, otro comunicador preguntó si esto ya era un hecho ante lo que Estrada Ferreiro dijo:
“Yo no soy enemigo de nadie. Yo no puedo decir lo mismo de ustedes en lo general, que son mis amigos, eso ustedes lo saben nada más, porque, porque la amistad se demuestra, no es cuestión de un momento o de una secuencia de tiempo”.
Por ejemplo, por preguntas incomodas, ¿tampoco se va a enojar?, sondeó el inocente muchacho.
“No, no, a mí lo que me molesta es la insidia, la perversidad con la que actúa alguien o algunos, que a fuerzas quieren que conteste uno algo que no es lo correcto y que no debes contestar, ósea, que no pongan palabras en mi boca”, enfatizó.
Añadió que tampoco tiene asesores para que le digan lo que tiene que hacer y él actúa por iniciativa propia.
“Nadie va a influir en mi para cambiar mi forma de ser”.
¿Entonces no anda huyendo de la prensa?, preguntó una comunicadora para asegurarse bien de lo dicho.
En respuesta obtuvo otro intento del edil por ser chistoso:
“De ti nada más”, acto seguido el asesor que acababa de ser negado soltó una risita celebrando la comicidad de su jefe.
A pesar de sus intentos por ser gracioso y recuperar la aceptación que dice no buscar, el pasado 16 de septiembre quedó evidenciado el rechazo, cuando los presentadores del desfile hicieron mención de su nombre, ante lo que se obtuvo un inminente “¡BUHHH!”, de rechazo entre los asistentes.
Es imposible engañar a la gente aunque los funcionarios de allegados a Estrada Ferreiro lo defiendan a ultranza y se agachen como perritos agradecidos por haber sido recogidos de la calle, la realidad es que el trabajo del municipio no se basa únicamente en tapar hoyos o limpiar el tiradero que dejan otros. El problema de la ciudad es más serio y no se están viendo acciones contundentes para remediarlo.
Las lámparas tipo LED no han sido suficientes y muchos sectores aún permanecen a oscuras con luminarias inservibles, los asaltos y la delincuencia están a la orden del día.
El Cabildo Abierto se convirtió en una simulación pues a diferencia de años anteriores no se está informando sobre el avance en la atención de solicitudes, prueba de ello la boca de tormenta que había sido reportada en una de estas sesiones, pero de forma arbitraria el reporte nunca llegó a su destino, al igual que otros tantos problemas que siguen sin resolver.
A pesar de ello, el edil tiene ínfulas de grandeza y fuentes cercanas aseguran que no desiste en su intención de contender a la gubernatura en 2021, para lo cual ya está conformando un séquito de seguidores a los que estaría beneficiando para agarrar impulso desde ahorita.
Definitivamente, Estrada Ferreiro perdió el juicio, el rumbo y la cordura actuando simplemente como un tinterillo como el de la película mexicana de 1950 “Entre abogados te veas”.