- Quieren dar pasos de gigantes con pie pequeño
Redacción
Desde hace algunos días, las altas temperaturas se han manifestado en todos los rincones del Estado, se podría creer que es la costumbre de sobrellevar el calor que tanto se acostumbra en Sinaloa cada año, pero la verdad es, que el fenómeno de este año tiene que ver en parte con la exasperada calentura que están padeciendo muchos de los políticos y pseudopoliticos de Sinaloa, irradiando con todo y sus delirios futuristas de hacerse un curul de alto rango dentro de la política de la entidad Sinaloense.
Algunos nacidos completamente de la nada, desconocidos hasta para ellos mismos y ahora enardecidos de reflectores populares, quieren dar pasos de gigantes con pie pequeño, pues no es ningún secreto que la fuerza dominante en los congresos del país, en su mayoría están conformados por la ola que resultó la figura mesiánica de AMLO, pues emprendieron vuelo aprovechando viada ajena. Una vez posicionados como por arte de magia y que les cayera la sorpresa de su vida, no hubo quien los bajara de esa nube, donde la faena mental y el porrismo con el objetivo de convulsionar la estructura social del país, son sus mejores habilidades.
Circo, maroma y teatro, dando contras y rezonga a la constitución mexicana la cual les ha pasado de noche, han hecho y desecho con la legislatura lo que se les ha venido en gana, con la falsa bandera de una transformación con el pueblo, cuando este último resulta siempre ser el más afectado cuando hacen de las suyas, algunos de forma rebelde denostando los estragos que el poder puede ejercer en la personalidad de un individuo y otros que siguen bajo los efectos del “toloache” de Andrés Manuel. Juntos pero no revueltos.
Esto no les ha dado abasto, pues, perfilan sus fauces y sus garras en aras de hacerse con una presa de mayor tamaño, peso y calidad. Algunos tan osados y cínicos como para balbucear “humildemente” que quieren participar en las próximas elecciones una candidatura para gobernador, cuando los resultados en sus municipios y distritos les han hecho ver que les quedó grande el puesto lo que es sin duda alguna una ambición y falta de escrúpulos éticos.
Y ni hablar de la sorpresota que se han dado aquellos quienes vertieron su confianza en estos inéditos “representantes del pueblo”, que han quedado a deber la mayoría de promesas y esperanza que en una verborrea que al día de hoy no le para al presidente, ya que él fue quien hizo campaña por todos estos morosos, ellos simplemente se sentaron y observaron el show de magia, algunos disfrazados de adeptos, lobos con piel de oveja y otros más envilecidos bajo la cegadora luz de la “transformación”.
Tal vez ellos tenían una concepción más pequeña y selectiva de la palabra “pueblo”, refiriéndose a sus amistades, familiares y uno que otro abonado. ¿No que las viejas mañas ya no se iban a repetir? Bueno pues, parece que más rápido cae un hablador que un cojo.
Ante este panorama habrá que sentar cabeza y meterle ceso sobre las decisiones electorales que se tomarán, pues estos personajes ya hacen planes desde las sombras y quieren repetir la fórmula del 2018, no obstante, desde aquel entonces el velo mágico que cubría los ojos de muchas personas se ha ido convirtiendo en un harapiento panorama de la desilusión y está para pensarse dos veces si se quiere un personaje de estos frente a un poder de esa envergadura.
