Colaboración Miguel Ángel Rodríguez
En tiempos difíciles, el liderazgo político actual se manifiesta en dos formas; en las redes sociales y el quehacer del trabajo político en el campo social. Esta última con mayores resultados positivos “reales”; es decir, el que trabaja por las necesidades de las personas conseguirá activar en ellos la capacidad de organizarse y manifestar un avance democrático en la región o país.
En un sistema socioeconómico, donde las estrategias políticas y sociales son fundamentales para organizar a la Sociedad, el liderazgo político no tiene descanso. La actividad dentro de las agendas de los políticos -que si tienen visión reformadora hacia el bienestar social- son más propicias para generar una estabilidad social. Es evidente que los “políticos con carácter social” son de mayor éxito.
¿Qué es la estrategia social?
Según Schröder (2004: 14), toda reflexión y planificación orientada hacia un objetivo y ejecutada de manera enfática es una planificación estratégica.
Las Estrategias Sociales se distinguen por darle especial importancia a la participación social con el propósito de identificar nuevas oportunidades a fin de asegurar el bienestar de la población. Las estrategias sociales deben de cumplir cuatro aspectos de manera co-participativa.
1.- Identificar las necesidades de población (segmentación)
2.- La auto-observancia de la participación ciudadana; grado de responsabilidad que tienen las personas con los problemas territoriales y sociales, sin afectar a los demás.
3.- Planear la gestión co-participativa entre los líderes políticos y los ciudadanos (trabajo permanente)
4.- Legislar las iniciativas microsociales y macrosociales (Salud, empleo, servicios, educación, seguridad, etc.)
En Sinaloa, según INEGI (2015), somos 2,966,31 habitantes distribuidos en 1,502,236 mujeres y 1,464,085 hombres. Por consiguiente, las estrategias sociales pueden tener variaciones, ya que las necesidades de estratificación social son diferentes. Es decir, las condiciones de clase social e ingreso económico en las Familias son disímiles. Por lo tanto, las necesidades son diferentes, pero el objetivo es el mismo; organizar a la Sociedad. Esto último, es importante ya que cuando las personas se organizan en trabajos y gestiones de cambios sociales y económicos, sin afectar a los demás, estamos hablando de una participación estratégica bien diseñada y sobre todo comunitaria.
En este sentido estratégico, puedo citar la importancia del MC. Héctor Melesio Cuén Ojeda y el Partido Sinaloense por lograr avanzar en los cuatro aspectos antes descritos. También es significativo resaltar, que la estrategia del Maestro Cuén Ojeda es no manipular la opinión pública como otros políticos; con discursos evidenciando las malas acciones de gobiernos anteriores y que hasta cierto punto han sido objeto de escándalos mediáticos y legales. El objetivo es crear una co-participación ciudadana responsable entre la Sociedad y el liderazgo político.
