- Chantaje hasta en la salud
Redacción
La desvergüenza es un atributo que en la política actual se ondea como una infame bandera, de lado a lado, desperdigando vientos de cinismo y desfachatez. Tal es el caso de Morena, sí, otra vez ellos, ¿Y cuando no lo han sido? En plena crisis de salud mundial, dicho partido no desaprovecha para sacar ventaja de la forma más baja posible, y esto ahora se ha hecho factible a través de un spot en televisión, donde “desinteresadamente” cederán su presupuesto en pro de la adquisición de vacunas contra el tan mortífero covid-19, enfermedad que ha ejercido de verdugo para México desde el comienzo de la crisis, dejando más de cien mil muertos y sobrepasando el millón de contagios.
El claro insulto a la inteligencia de las personas es obvio, ya que, para nadie es un secreto que las próximas elecciones están a la vuelta de la esquina y la 4t busca ir cultivando sus votos de manera desesperada, pues estos últimos 2 años desde su arribo a la cúspide del poder, han quedado a deber, aquellas vociferaciones de esperanza y redención se quedaron en discursos, en humo que sedujo las mentes de las personas, las envileció y nada más de ahí ha pasado.
¿A quién tratan de engañar con este falso gesto humanitario? ¿No es acaso tarea del gobierno independientemente del partido del que provenga su representante, proveer la seguridad y salud que los ciudadanos requieren? Bueno, pareciera que para los morenistas esto no significa nada, y en cambio la vacuna que se requiere para que miles de vidas dejen de perderse, se vuelve una mercancía de trueque de cara a la próxima contienda electoral. El voto por la vacuna. Y no faltará la vieja excusa, de que los anteriores robaron o hicieron cosas peores, como si esto se tratara de una competencia para ver quién es más ruin, y es que en ese disco rayado se han quedado, abogando por una lucha que ellos mismos han hecho interminable, dejando seco el campo para una revalorización de los valores de nuestro país que realmente produzcan un cambio
Para pensarse sin duda alguna, esta es otra de tantas que este infame partido ha venido haciendo desde que se sentaron en los curules de la legislación, el poder les ha hecho estragos el sistema nervioso. Pese a las cifras que no dejan de elevarse día con día, estos personajes se empecinan en terminar el trabajo que anteriores legislaturas habían comenzado y llevado en proceso: hundir al país. Irónicamente una tarea a la que durante años se decían contrarios, autodenominándose defensores del pueblo y sus derechos, pero parece que las cosas han cambiado, detrás de esos ideales de izquierda y esperanza, las verdaderas garras están saliendo, el trampolín para hacerse con la corona en la política fue su fachada de humanistas.