Mario Zamora trota y cruza el bulevar Belisario Domínguez. En el séptimo día de campaña ha empezado un recorrido por varias vialidades del sector Centro de Los Mochis. Mario Zamora entra a la tienda de abarrotes, le busca la mirada al propietario.
El próximo gobernador saluda y se presenta. “Soy Mario Zamora, candidato a gobernador”, le dice.
Platican en corto. Comparten ideas a bajo volumen, que es como mejor se disfrutan, como más se extienden.
“Cuente con ello”, le dice el hombre, convencido de votar el próximo 6 de junio por el candidato de la coalición Va por Sinaloa, integrada por el PRI, PAN y PRD.
Mario Zamora sale y alarga y apura el paso. Avanza a otro negocio y entabla otra plática.
Mario Zamora va con un automovilista, aborda a un peatón, charla con las amas de casa. Sube, baja.
En la esquina habla con un joven, más allá con una mujer, después con una jovencita, con un adulto mayor.
Mario Zamora avanza entre los carros, a zancadas va por las banquetas, toca las puertas de las casas. Suda la camisa, trabaja para lo que viene. Hay seriedad en el compromiso asumido.
Sigue por las calles, entre la gente. Acá dialoga otra vez con la primera persona que se encuentra.
Y así avanza una cuadra, dos, cinco, siete y va notando la adhesión a su proyecto. La gente se suma.
Mario Zamora no para. Por la mañana estuvo en el ejido El Porvenir, en el crucero de Rosales y Centenario, en la Villa de Ahome, en Bachomobampo y ahora se encamina rumbo a la colonia 12 de Octubre, para después ir a Jiquilpan Viejo.
Mario Zamora sigue. La jornada no termina. La jornada apenas inicia y tiene su punto final el 6 de junio. De ahí en adelante lo mejor está por venir.