Xicoténcatl Barajas
El diputado local, Serapio Vargas Ramírez, ungido por el distrito 18 bajo las siglas de MORENA, no comparte con sus compañeros de legislatura la cerrazón de tener las puertas cerradas del Congreso del Estado y ha exigido en varias ocasiones que éstas se abran para el pueblo, al igual que para los medios de comunicación que están limitados en su quehacer por la falta de congruencia de la mayoría de diputados.
El pretexto de la pandemia del Covid-19 les cayó como “anillo al dedo” y no es solo el legislador morenista quien afirma que las medidas que se toman al interior del recinto parlamentario son intencionales, sino, los diversos grupos de manifestantes que se topan con los muros de hierro y el sofisticado equipo de vigilancia al momento de querer llevar alguna propuesta a sus representantes que viven en una burbuja de lujos y comodidades dándoles la espalda.
Vargas Ramírez, quien toda su vida ha sido un líder controvertido, combativo y combatido, no tiene pelos en la lengua y le llama al pan, pan y al vino, vino, por lo que ya se echó encima a los de su mismo partido guinda, pues no consiente que la casa que se paga con dinero del pueblo esté cerrada para el pueblo con un sin número de excusas dizque para prevenir los contagios de coronavirus, mientras que los diputados se desplazan por todos lados viajando, yendo a reuniones, viéndose en lujosos restaurantes y hasta en centros nocturnos de diversión en destinos turísticos paradisiacos.
