* Las elecciones son impositivas y no democráticas
Xicoténcatl Barajas
Las nueve Juntas de Sanidad Vegetal con área de influencia en zonas agrícolas de la entidad y que tienen voz y voto en el Comité Estatal de Sanidad Vegetal del Estado de Sinaloa (CESAVESIN) son vistas y disputadas por grupos políticos regionales y otros de la sociedad civil como un apetitoso botín político, porque además en ellas se mueven muchos millones de pesos y todo tipo de intereses.
Así es que, la renovación de sus consejos de administración que tradicionalmente se venía llevando a cabo mediante planillas integradas por auténticos campesinos y agricultores se contaminó y ha cambiado el método convencional, quitándole la facultad de decidir libremente a los productores del sector social ejidal y a los pequeños propietarios.
Hay presidentes municipales –desde luego- que buscan incidir con sus aspirantes, mientras que los diputados, ya sean federales o locales también mueven sus cartas entre los hombres del campo con el afán de demostrar control y poder.
Aunque las características agrícolas y sociales de cada zona son distintas, hay corrientes políticas y de otra índole moviéndose y, hasta los funcionarios de la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural del Gobierno Federal, así como del renglón agropecuario sinaloense están siendo desactivados en los procesos de cambio de las presidencias de dichos organismos y lo peor y más triste es ver cómo los liderazgos naturales son despojados de sus legítimas aspiraciones y de sus organizaciones por factores externos a la vida cotidiana de su quehacer campirano sin que haya árbitros con autoridad legal para el desahogo de elecciones democráticas y no impositivas.
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