- No exigen a los candidatos pautar en medios formales y confiables ni apegarse al padrón nacional de medios de la SEGOB ni mucho menos al propio catálogo de medios del INE para la difusión de campañas
- Mientras, gurús digitales y sitios web fuera del marco legal fabrican campañas negras y fake news
Xicoténcatl Barajas
Tras los reclamos hechos por la candidata de MORENA del distrito 07 federal en Sinaloa, Merary Villegas Sánchez a los medios de comunicación de la capital sinaloense, el tema acerca de la normatividad de los medios de comunicación y su respectiva compra de publicidad en tiempos electorales vuelve a estar sobre la mesa como una problemática que nadie quiere atender y que lo contempla la ley general de comunicación social del país publicada en el Diario Oficial de la Federación.
La morenista, acusando a sus contrincantes políticos por la compra excesiva e irregular de publicidad, arguyendo que esta va en contra de la ley electoral vigente, Villegas Sánchez retomó una serie de problemáticas que resultan incomodas para las autoridades electorales locales y federales, quienes durante años han dejado de lado algo que impacta en la sociedad de manera contundente, sobre todo, en tiempos de campañas.
Y es que, en pocos años, los portales web de noticias que se difunden también en redes sociales como Facebook, Twitter e Instagram han proliferado de manera desmedida, fuera de todo marco legal al carecer de registro ante la Dirección de Normatividad de Medios de la SEGOB y del Padrón Nacional de Medios de la misma dependencia, teniendo vía libre para esparcir fake news, calumniar e instigar al odio en campañas negras masivas de desinformación para desestabilizar el orden público.
Pero lo más grave ha sido que muchos de estos sitios en internet han ido creciendo a través de las ganancias que producen, algunos expandiéndose gracias a las bondades del presupuesto público, pues, es sabido que distintos personajes sin formación profesional en el ejercicio del periodismo o la comunicación que cuentan con una de estas páginas recogen una jugosa recompensa monetaria al ofrecer espacios publicitarios para políticos y gobernantes sin reglamentación alguna.
Mientras tanto, el INE y el IEES brillan por su ausencia para entrarle al tema, siendo incapaces de aplicar la normatividad establecida, la cual indica que los candidatos a puestos de elección popular están obligados, por Ley, a la compra de espacios publicitarios en medios de comunicación legalmente constituidos que cuenten con Reserva de Derechos al Uso Exclusivo expedida por el Instituto Nacional de Derecho de Autor de la Secretaría de Cultura, asimismo, el Certificado de Licitud de Título y Contenido que otorga la Comisión Calificadora de Publicaciones y Revistas Ilustradas de la Secretaría de Gobernación, así como los estudios de circulación, cobertura geográfica y perfil del lector que son requisitos indispensables para inscribir un medio de comunicación en el Padrón Nacional de Medios de la SEGOB y en el Catálogo Nacional de Medios del Instituto Nacional Electoral, pues el presupuesto para la publicidad y difusión de campañas políticas que otorgan los órganos electorales debe ser comprobado y en su caso auditado, sin embargo, ¿cómo evaden los partidos políticos y candidatos esas reglamentaciones para la compra de publicidad?
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