¡LO QUE SEA…QUE SUENE!

  • Conflicto de la UAS y la división de opiniones
  • Las partes están a la defensiva y no quieren perder políticamente
  • Hay nepotismo, acoso laboral y violencia de género en “sembrando vida” Sinaloa

Xicoténcatl Barajas

El largo y tedioso conflicto que los tres poderes del estado sostienen -aunque se niegue- con la Universidad Autónoma de Sinaloa y del cual todos los sinaloenses hemos sido testigos, sigue dividiendo opiniones en torno a la solución, pues las partes involucradas esgrimen razones propias y, en la opinión pública lo que se dice es que nadie quiere ceder ni mucho menos perder políticamente. Todos están a la defensiva más allá de querer dirimir desacuerdos por la vía del diálogo y, aunque exista el interés  del gobierno federal para intervenir como mediador del conflicto que se generó por la aprobación de la Ley de Educación Superior del Estado de Sinaloa hace ya más de un año, los ánimos aquí están caldeados, la olla política hierve tal y como cuando los diputados aprobaron dicha reforma legal que afecta la autonomía universitaria y que fue publicada en el periódico oficial del estado para que surtiera efectos legales, por lo cual la UAS buscó el amparo de la justicia federal y ha salido a manifestarse a las calles, logrando dejarla sin efecto y haciendo que el Congreso del Estado después de muchos meses se desistiera del recurso legal que tenía activo en el tribunal colegiado, algo así como reconocer que nunca tuvo la razón. Sin embargo, los dichos de los abogados de la casa rosalina y del encargado del despacho de rectoría, Robespier Lizárraga Otero parecen advertir un plan B (con otras iniciativas) por parte de los tres poderes que los han querido sentar en el banquillo de los acusados para ser juzgados por supuestos malos manejos de los recursos con los que opera la institución educativa que, según la Auditoria Superior del Estado y la fiscalía general de Justicia hay elementos para enjuiciarlos.  Ante eso, la mediación política pudiera jugar un papel importante, ya que, el problema ha crecido tanto que el daño a la imagen de la UAS -discuten sus representantes – y la de ellos ha sido ensuciada con injurias y descalificaciones por la percusión política que sienten que se está dando en su contra. Y fue el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador el que ha decidido ofrecer su mediación respetuosa conminándolos  para que por conducto de la secretaria de Gobernación, Luisa María Alcalde Luján logren un acuerdo sobreponiendo la legalidad y la razón a quienes les asista y dejar de una vez por todas solucionado el desgastante encontronazo que ha sido retomado como  caso de estudio por universidades del país y del extranjero al ver la violación a la autonomía dotada por la constitución política de México…Y en esta escena hay dos grupos de choque, brazos operantes y ejecutores de planes en el conflicto que son movidos tras bambalinas por los intereses de quienes miden sus fuerzas y que se están dando con todo por el botín político y económico que representa el alma mater. No hay de otra, es lo que a ojos de todos los sinaloenses y más allá del territorio estatal se está viendo y demostrando en casi año y medio que tiene el jaloneo entre los tres poderes del Estado y las autoridades de la casa rosalina, incluyendo al político sinaloense, Héctor Melesio Cuén Ojeda y a su hijo del mismo nombre. CIVITAS-UNIVERSIDAD -aunque lo nieguen- es avivada desde el Congreso del Estado por el presidente de la Junta de Coordinación Política del Congreso del Estado, el legislador Feliciano Castro Melendrez y por el diputado Sergio Mario Arredondo Salas, quienes impulsan junto con algunos catedráticos conocidos como “los exquisitos” y estudiantes de una que otra facultad los ataques en contra de la UAS para moverles el tapete a quienes tienen el control de la institución en ente momento. Y, por otro lado, la organización DELBIENHACER que es el ala oficial en la defensa de la Universidad Autónoma de Sinaloa y que aglutina a trabajadores, maestros, alumnos y representantes sociales que sienten indignación y señalan al gobernador de Sinaloa, el ex rector Rubén Rocha Moya, de ser el cerebro de la convulsión que se vive en la universidad de los sinaloenses. Sea como sea, los perjudicados con este problema que ya escaló niveles insospechados, como han sido amenazas, supuestos levantones y más reciente el atentado a balazos que sufrió el director general de comunicación social, Arnoldo Valle Leyva, son los estudiantes. Por todo eso, desde luego, hay zozobra entre los académicos y padres de familia por no saber cuándo se resolverá la tediosa y encarnizada disputa entre los dos grupos que, como las grandes mafias se pelean los intereses que están en juego. Seguramente, las personas a las que utilizan como carne de cañón desconocen el trasfondo que hay en esto, más allá de la Ley de Educación Superior y de la reforma a la Ley Orgánica de la Universidad Autónoma de Sinaloa, pues entre las partes involucradas, puede haber coludos y rabones, sino, al tiempo…Uno de los programas insignias del gobierno federal que fue instaurado por el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, ha tenido en varios estados del país señalamientos de malos manejos por parte de sus coordinadores y funcionarios de primer nivel. Aquí en Sinaloa no es la excepción, así lo denunció ante esta revista el trabajador social y ex empleado Jesús Terán, quien afirma que el coordinador de dicho programa en la entidad, Alejandro Apolo Acosta Cota permite tratos despóticos, nepotismo, acoso laboral y violencia de género. Por no convenir a sus intereses y porque se ha formado en la coordinación estatal un círculo vicioso en el que no encajó él por no prestarse a situaciones deshonestas y malos manejos, fue removido de su cargo como facilitador. Señaló el quejoso que dicho coordinador asumió la responsabilidad a la salida de Rodolfo Valenzuela, quien hoy es diputado local electo por MORENA, lo que le benefició para colocar en puestos clave a personas afines y familiares, como es el caso de su sobrina Bianca Cota Álvarez promovida como facilitadora en su natal municipio de Chóix. Acusó el ex empleado que ha sido amenazado, violentado en sus derechos humanos por recibir violencia de género, además de sufrir acoso laboral por parte de María de Jesús Vázquez Espinoza, quien tiene también a su sobrina Itzel Vázquez cobrando como enlace administrativo. Aparte, apuntó que Vázquez Espinoza tiene como comparsa a otra facilitadora de nombre Sofía Trejo Lemus, quien representa a la vez el colectivo “Maz conciencia en Mazatlán”, misma que fue denunciada por la alcaldesa electa de Cosalá, Carla Corrales por malos manejos del programa en ese serrano municipio.

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