Comunicado
Como una muestra fehaciente de que los universitarios están alertas y en pie de lucha ante cualquier llamado, esta mañana un grupo numeroso de profesores investigadores y consejeros estudiantes de la Comunidad Participante de Del Bien Hacer, dejaron en claro que quienes realmente representan a la Universidad Autónoma de Sinaloa (UAS) son ellos y no esos pequeños grupos que hablan de unidad y que auto proponen, por órdenes del Ejecutivo, consultas para modificar la Ley Orgánica de la UAS, hecho que sería algo ilegítimo.
Esta reunión fue encabezada por algunos integrantes de la Comunidad Participante como el caso del doctor Gilberto López Alfaro, quien señaló que hoy con mayor fuerza están unidos no solo para enaltecer con proyectos de investigación a la región y abonar a la mejora académica de los programas educativos, sino también están firmes en la defensa de la autonomía universitaria y más en el caso de la andanada que se vive por parte de las autoridades del Gobierno del Estado.
“Aquí está representada realmente la Universidad, se dan cuenta pues que la Universidad aquí sí está presente el grueso de los universitarios y decirles que aquellos intentos, propuestas, ideas de reformas; hoy hubo un pronunciamiento en los medios del presidente de la Comisión de Educación del Congreso del Estado señalando de que se van a ir, que el Congreso va a realizar una consulta regresando de vacaciones. Decirles que cualquier consulta que se pueda formar, el proceso de la Ley de Educación Superior sigue estando en litigio y por lo tanto cualquier reforma o intento de reformas a la Ley Orgánica de la Universidad realmente estaría fuera del marco de la legalidad”, aseveró.
Acompañado por profesores investigadores y alumnos consejeros de facultades como las de Biología, Derecho, Arquitectura, Odontología, Enfermería, Nutrición, Economía, así como representantes de Escuelas Preparatorias como la Sandino y Central, el académico de la Facultad de Estudios Internacionales y Políticas Públicas señaló que desde un inicio esa propuesta de Ley que se pretende realizar atenta deliberadamente contra la autonomía universitaria.
“Porque pretende supeditar todas las acciones fundamentales de la Universidad, de autogobierno, a la Secretaría de Educación Pública. Entonces ¿Dónde queda todo este proyecto de defensa universitaria? Cuando precisamente se quiere supeditar los contratos de los trabajadores universitarios, profesores investigadores, de docentes, se quiere supeditar por ejemplo la creación de todos los planes de estudio, se quiere supeditar todo lo que tiene que ver con el financiamiento de la Universidad de tal manera que todo esto atenta en contra de la autonomía ya lograda y definida a nivel nacional”, expresó.
Así mismo dejó en claro que siempre los universitarios han estado abiertos al diálogo, dejando de manifiesto que se desea una real universidad democrática, enfatizando que el problema que hoy radica es el cómo se quiere hacer y, sobre todo, en donde la UAS quede supeditada al Gobierno Estatal, lo cual jamás se permitirá, por lo cual dijo que si realmente se realiza la consulta deberá ser del interior de la institución, en donde los universitarios marquen las directrices de cómo se hará.
Por su parte el joven estudiante de la Facultad de Arquitectura Ángel Cañedo Reyes, hizo el llamado a que se preste atención a quienes son los verdaderos representantes de la UAS y no se engañe a la sociedad con caras falsas o personas que están aprovechando la circunstancia para obtener ganancias personales, ya que dijo que los verdaderos universitarios son de excelencia.
Así mismo el doctor Tiojari Dagoberto Guzmán Galindo, de la Facultad de Ciencias de la Tierra y el Espacio de la UAS, también hizo el llamado a respetar la autonomía, afirmando que los universitarios están abiertos al diálogo siempre y cuando las cosas sean legítimas, manifestando que si se hace una consulta ésta debe ser desde adentro de la institución y jamás de entes externos, por lo que indicó que deben estar alertas y no permitir intromisiones de quienes solo buscan dañar al gran trabajo que se hace en la Casa Rosalina en la formación de miles de jóvenes.
