LAS CALAVERAS DE ALBERTO CABANILLAS
Se le ha visto de lejos,más hambrienta que de costumbre,ahora viene por los viejoso aquellos que atizan la lumbre. No conforme con la carne,dicen que hasta los huesos se lleva yes tan grande su hambre,que come y come ¡ y no se llena! Pobre de esa huesuda,aprendió de malas mañas…