CARRILLO LEY SE SIENTE TRANQUILO CON LA POLÍTICA AGRÍCOLA DE AMLO

  • Aunque admite que la moneda está en el aire por no saber cómo serán las reglas del juego ni cómo reaccionarán los industriales.

Xicoténcatl Barajas

Productor y presidente de Almacenes Colhuacan, empresa forjada con el esfuerzo de agricultores y ejidatarios de la región centro del Estado e integrante de la Coordinadora Única de Productores Agrícolas de Sinaloa que lidera el doctor Emilio González Gastélum, Antonio Carrillo Ley, dice confiar y sentirse tranquilo con la política agrícola que implementará el Gobierno de la República de Andrés Manuel López Obrador, aunque admite que la moneda está en el aire y “no sabemos cómo serán las reglas del juego”.

Entrevistado en las oficinas adjuntas a las bodegas de reciba de Almacenes Colhuacan, el presidente  del Consejo de Administración explicó el desglose del presupuesto de egresos que le hiciera en reunión el senador de la República, Rubén Rocha Moya, quien les ha pedido que se tranquilicen, que Sinaloa está contemplado aun con el recorte presupuestal.

“A nosotros siempre nos ha preocupado la agricultura comercial, porque López Obrador en sus inicios le dio preferencia a los productores de subsistencia, a los de bajo ingreso, a los de 5 hectáreas y les puso un precio de garantía alto hasta 20 toneladas, por eso la duda y preocupación”, expresó Antonio Carrillo.

Ante esto, Rocha Moya les dice: “ustedes no se preocupen, están contemplados, el recorte principal que le hicieron al presupuesto de agricultura es a muchos programas que no llegaban al productor, que se quedaban con líderes o secretarios de agricultura de los Estados y que generaban mucha corrupción; en muchos programas había los famosos moches, al productor le decían aquí está tu cheque pero tráeme  el 30 por ciento y te lo llevas”.

Con esas reducciones, manifestó, les aseguró el Senador de la República que se acabará el intermediarismo y el coyotaje, “la idea es que les lleguen ahora al productor, no a las organizaciones o a las dependencias de Gobierno y supuestamente recortando todos esos programas vamos a salir adelante”.

“Nos decía Rocha Moya que va a continuar en el caso de Sinaloa la agricultura por contrato; vamos a tener los mismos apoyos en el caso de compras de cobertura”, apuntó Carrillo Ley quien admite que existen todavía dudas y malas interpretaciones al respecto por no haber reglas de operación.

Ejemplificó que antes los industriales se iban con ASERCA y negociaban, porque ellos ponían el precio de los granos al Gobierno, por eso eran las múltiples manifestaciones y protestas; los funcionarios de ASERCA eran empleados de MASECA y las grandes empresas; “al final iban los gobernadores y el precio base ya estaba fijado; ahora se nos dice que para que no haya dispendio ni desvíos se van a pedir bases más altas y con eso ya el Gobierno Federal no le tiene que aportar y el productor va a tener mejor ingreso”.

“Como empresa sí me preocupa porque no sabemos cuáles van a ser las reglas del juego y como dicen las leyes de la física: a toda acción corresponde una reacción, no sabemos cómo vayan a reaccionar los industriales tampoco”, precisó.

 

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