Xicoténcatl Barajas
Cuando Jesús Estrada Ferreiro pupulaba como litigante a los alrededores del Supremo Tribunal de Justicia, vio la posibilidad de incursionar en el negocio de la comida callejera.
Para eso, frente a las instalaciones de la unidad administrativa de Culiacán tuvo la osadía de parkear una taquería móvil sin permisos violando todos los reglamentos municipales.
Lo que desconocía quién hoy es presidente municipal de Culiacán es que en la acera de la banqueta donde quiso desplazar a los taqueros que ya tenían antigüedad, es que allí estaba instalado el restaurante Santa Lucía, que fue -se supo- propiedad del ex gobernador Juan Sigfrido Millán Lizárraga.
Por esa razón, Estrada fue retirado con la fuerza pública, y las grúas de tránsito municipal levantaron el armastrote el cual fue estacionado a las afueras de su despacho por la calle Juan José Ríos, dónde duró algunos años ponchado y deteriorado.
Hay quienes dicen, que por eso ahora está actuando en contra de los puestos de comida que invaden las banquetas, pues aún tiene ese resabio por no haber cuajado su negocio frente al Palacio de Gobierno.