- Su destitución es fruto del liderazgo de Teresita Ochoa
Xicoténcatl Barajas
La destitución del doctor Francisco Cuauhtémoc Frías Castro de la dirección del ICATSIN es el fruto del real liderazgo que ejerce al frente del Sindicato de Trabajadores al Servicio del Estado, Teresa de Jesús Ochoa Pérez, quien con fuerza y unidad defendió a los empleados estatales de esa dependencia.
Este caso no es un asunto menor, se trata de la “sepultura” política y del servicio público del hombre que una vez fuera el más poderoso después del gobernador Renato Vega Alvarado, pues siendo secretario General de Gobierno tuvo todo el control del Estado, lo cual le alcanzó para acumular trayectoria y ser a la postre dirigente estatal del PRI, diputado local y federal, entre otros cargos que vino ostentando hasta estos días.
Con una triste retirada, cuestionada en todos los aspectos por supuesto abuso de poder, maltrato laboral y hasta supuestos actos deshonestos en la función pública, Frías Castro pasa a ser historia y a “jubilarse” de una manera poco decorosa.
Y esto es de extrañarse, pues quienes lo conocen desde hace años no dan crédito a la forma en que se condujo en este encargo que le confirió el mandatario estatal, Quirino Ordaz Coppel, ya que, dicen desconocer a este personaje de la política sinaloense que perdió el piso y, que después de ser obispo pasó a ser sacerdote.
