Xicoténcatl Barajas
Fue a la mitad del sexenio de Juan Sigfrido Millán Lizárraga (1999-2004) y siendo dirigente de la sección 53 del SNTE el profesor Oscar Octavio Beltrán Ruiz –ambos rosarenses- cuando en el lecho del rio Culiacán y sobre los gasoductos de PEMEX inició la construcción de la polémica Unidad de Servicios Estatales (USE).
En ese entonces el gobierno de Sinaloa y las cúpulas del magisterio nacional y local vivían un tórrido romance que los llevó a disponer de los ahorros de los trabajadores de la educación para invertir en la edificación del inmueble que hoy está en disputa.
La tentación y la ambición desmedida, mezclada con los intereses políticos de JSM, así como de la lideresa nacional de esa época, Elba Esther Gordillo Morales y el sempiterno líder moral del SNTE 53, Daniel Amador Gaxiola, pudieron ser los motivos de la constitución de un fideicomiso legaloide para amparar la malversación de los recursos que hasta la fecha se desconoce quién los manotea.
Profesores jubilados que en esas fechas estaban activos, coinciden en decir que en su momento escucharon acerca de que la USE era propiedad del sindicato, sin embargo, todo se mantuvo con mucho hermetismo, vertiéndose poco a poco información del tema, hasta que hoy salió a la luz pública con los encontronazos entre el gobernador del Estado, Rubén Rocha Moya y el personero de Daniel Amador, el maestro Fernando Sandoval Angulo.
De la USE, así como del Sistema de Ahorro y Préstamo (SIAP) los trabajadores de la educación y los sinaloenses han escuchado las expresiones y argumentos de los dos bandos, tanto de la parte patronal, como de la sindical, pero no logran desenredar la madeja que cada vez se enreda más, porque ellos revelan únicamente información a medias y pareciera que a conveniencia.
No precisan por qué se invirtió dinero del magisterio sin pedir autorización a los maestros y, si fueron el ex gobernador Juan Sigfrido Millán Lizárraga, Elba Esther Gordillo Morales o Daniel Amador Gaxiola los autores intelectuales de la estafa maestra.
Tampoco señalan a los implicados en el fideicomiso, a la cuenta de quién se hicieron o se hacen los depósitos de la renta del inmueble y, cómo fue que de la noche a la mañana Daniel Amador Gaxiola, Lorena Álvarez Gámez y Germán Contreras García cambiaron sus casas del fraccionamiento ISSSTESIN Humaya por fastuosas residencias en el exclusivo complejo residencial de La primavera.
Lo cierto es, que la podredumbre de la cloaca ya salpicó a los ex gobernadores Jesús Aguilar Padilla, Mario López Valdez y Quirino Ordaz Coppel, quienes omitieron, fueron cómplices o, sencillamente cedieron a los chantajes del moribundo y desesperado grupo caciquil de Amador Gaxiola.
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